El Papa Francisco realizó numerosas declaraciones a favor de la paz mundial, aunque fue muy contundente a la nueva guerra: a la «guerra de las palabras», enfatizando que las palabras pueden ser armas destructivas que alimentan los conflictos en todos los ámbitos. Su mensaje se centra en la necesidad de un diálogo constructivo, la construcción de puentes y la promoción de una comunicación desarmada y «desarmante». El Papa ha criticado la «guerra de las palabras» como un obstáculo para la paz y ha instado a rechazar el paradigma del conflicto en la comunicación.

En el libro «La guerra de las palabras», el autor Paul David Tripp muestra que la lucha con la comunicación no consiste en aprender nuevos métodos de habla ni en buscar nuevas estrategias para restaurar relaciones rotas. La lucha con la comunicación tiene su origen en una guerra más profunda: la guerra por la conquista de nuestro corazón. Quien gobierne nuestro corazón, gobernará nuestra forma de hablar. 

Reflexión y letras. Por Eduardo Viera, periodista de El Turista en Misiones e Iguazú 24.